¿Cómo afecta a mi forma de correr tener el pie plano?

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Los pies, y más en concreto el pie plano, como base de apoyo de todo nuestro cuerpo en el suelo, tienen una importancia capital en el buen funcionamiento del mismo y cualquier alteración, mayor o menor, tendrá afectación al resto de nuestro cuerpo. El pie plano es aquel en que el arco,o bóveda plantar, está más disminuido de lo normal y el eje del pie se cae hacia la parte interna o medial del cuerpo. Se estima que un 20% de la población mundial no presenta desarrollo del arco en un pie o en ambos pies.

¿Es una desventaja tener el pie plano para correr?

El hecho de tener el pie plano no significa que automáticamente tenga que ser un pie doloroso ni mucho menos, hay muchos corredores con pie plano que jamás han tenido ninguna lesión ni molestia, así pues la pregunta claves es: ¿por qué hay corredores con el pie plano que presentan molestias y otros no? Hay varios factores que intervienen:

1.- Correr es un gesto cíclico que se realiza avanzando hacia delante en el sentido de la marcha y cualquier alteración en la movilidad normal de las articulaciones predispone a dicha articulación y la musculatura afectada a trabajar de manera forzada y aumentar riesgo de sufrir molestias.

2.- Hay alteraciones que la musculatura del cuerpo puede soportar de manera provisional o temporal pero no indefinidamente y es cuando termina apareciendo la lesión, así pues, cuanto más trabajada tengas la musculatura implicada en la carrera menor probabilidad de sufrir molestias.

3.- Otro factor clave es la técnica de carrera que se tenga así cuanto más tiempo puedas correr con una buena técnica de carrera el riesgo de lesión será menor.

4.- Aquellos que en su vida laboral están muchas horas de pie, exponen a sus pies a más carga y cuando llega la hora de entrenar, pueden estar más fatigados que alguien que ha estado sentado todo el dia en su despacho.

5.- El sobrepeso también es un factor a tener presente, ya que cuanta más carga tenga que soportar el arco plantar, más probabilidad tiene de fatigar la musculatura que lo mantiene y termine colapsando o disminuyendo.

Lesiones asociadas al pie plano

Debido a la alteración en los ejes biomecánicos, un sujeto con el pie plano, puede tener más probabilidad de desarrollar algunas lesiones, pero no en ningún caso es una relación causa-efecto y depende varios factores como hemos visto en el punto anterior que pueden aumentar o minimizar el riesgo de sufrir alguna molestia. Las lesiones más frecuentes asociadas al pie plano son:

a) Tendinitis del Tibial Posterior: el músculo tibial posterior se encarga de mantener la bóveda plantar y una función anormal del mismo se traduce en un descenso de la misma.

b) Fascitis Plantar: es común en el pie plano que el mecanismo de windlass se vea alterado y no trabaje de forma eficaz generando tensiones en la fascia y en el tendón de Aquiles.

c) Tendinitis Aquilea: la cadena muscular posterior está sometida a mucha tensión y sostenida en el tiempo puede dar como resultado la inflamación del tendón de aquiles.

d) Sesamoiditis: debido a la rotación interna que sufre el pie, estructuras como el primer dedo, pueden recibir más carga de la que pueden soportan provocando inflamación en los huesos sesamoideos.

e) H.A.V ( Hallux Abductus Valgus): la desviación hacía la cara interna del pie, también puede ser una de las causas del conocido “juanete”.

f) Síndrome de la cintilla ilieotibial: en algunos corredores el pie plano va acompañado de una rotación interna de la rodilla provocando una tensión excesiva en la parte externa de la rodilla.

La prevención es el mejor tratamiento

Si tienes un pie plano y eres corredor deberías centrarte en reforzar la musculatura del pie, trabajar la propiocepción del pie y del tobillo, mejorar tu técnica de carrera y realizarte un estudio biomecánico por parte de un podólogo deportivo para valorar tu caso individualmente.